Es probable tener bajones emocionales o desanimarse, aunque también puede ser que se intente sobrellevar con la mayor normalidad posible.
Aun así, las dudas son muchas, y hay muchas preguntas comunes que suelen hacer las personas diagnosticadas y que compartimos contigo para resolver estas dudas generales que te has podido plantear.
Lo más común es que en tu visita al médico especialista te hagan una mamografía y/o una ecografía para descartar otras posibilidades, pero lo que confirma el diagnóstico es una biopsia de la zona que analiza el tejido en profundidad.
La cirugía suele ser una opción cuando el cáncer está localizado, pero existen diferentes tipos de cirugía que podría interesarte conocer, ya que depende del tamaño, la localización del tumor y su extensión:
Es muy normal que tengas miedo, un diagnóstico como este es una situación inesperada que supone un cambio importante en la vida, y cada persona lo afrontará de una forma u otra. Tengo mucho miedo porque no sé cómo llevarlo.
En este sentido, se puede pasar por diferentes fases desde que se recibe el diagnóstico. La fase de “shock inicial”, la negación o incredulidad, la tristeza y por último la fase de aceptación que suele coincidir con el tratamiento y el alivio que puede suponer saber que se está combatiendo la enfermedad. Puedes hablar con tu médico, con tus seres queridos y amigos, para que te den soporte y te orienten.
Existen muchas asociaciones que están dispuestas a ayudarte durante el camino y te acompañan sin ningún problema, puedes consultarles cualquier duda, pedirles ayuda emocional, etc. En este link encontrarás el por qué es bueno pedir ayuda a asociaciones de pacientes.
Ante cualquier duda, es también muy importante que consultes con tu médico, puesto que cada caso es diferente y las soluciones son concretas para cada persona. No olvides que son más las personas que están pasando por una situación similar, ¡no te rindas y mucha fuerza!